Foto de Marco Alarcón Zambrano
Al Hermano Marista Miguel Rodriguez que nos daba
matemáticas y que era el colector, le
rompieron la frente con un taco de zapato que era de madera y que
lo usaron como proyectil lanzado desde la barra del Mejía.
Eso provocó la indignación de la A.M.E y se inicio el verdadero lío. La policía
intervino y saco a los del Mejía por la
puerta sur que era de acceso principal.
Luego de unos 20 minutos nos intentaron sacar por la
misma puerta y recibimos una lluvia de piedras por lo que volvimos a ingresar
al coliseo. La policía nos mantuvo en el interior pero como el tiempo
pasaba,nos sacaron por la puerta de emergencia norte que da al mercado central
y nos obligaron a seguir hacia La Alameda. Allí en el monumento a Bolívar nos
reagrupamos y nos defendimos de la persecución que nos hacían los mejías.
Nos enfrentamos y los hicimos retroceder hacia San
Blas y el mercado central. A continuación nos ordenó el capitán que nos
replegemos hacia el parque y los brigadieres nos dieron la orden de ir a
nuestros hogares, cosa que se complicó porque ya los mejías del nocturno
salieron al parque, porque algunos cadetes fueron a lanzar piedras al colegio.
Alli se armó la grande en la Av. 10 de agosto y la
plaza de la Republica. Tuvimos que ir a apoyar a los compañeros y fue que el
cadete Casa sufrió la ruptura de cabeza por un piedrazo.
La policia montada nos corretió por el parque y nos
obligo a retirarnos hacia la iglesia del Belen. En esa calle hay una clinica
donde fue atendido el cadete. Algunos brigadieres para evitar más heridos nos
ordenaron retirarnos para las casas de cada uno. Entre broncas y piedrasos
pasaron como 3 o 4 horas. Eso recuerdo.
Ronald Carrillo Brigadier
Promoción 1980 - 1981.
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